IDENTIDAD

Caminaba todos los días por el mismo parque, el mismo paisaje que formaba parte de mi vida. Había nevado y hacia mucho frio. Entonces, descubri algo que nunca antes había visto. Una puerta al final del camino que me invitaba a pasar. Sentí miedo. No sé que encontraría al atravesarla. Pudo más mi angustia de no saber y crucé el umbral. Del otro lado había otro parque, distinto al que había transitado. Su paisaje no me era desconocido, pese a que nunca lo había visto. El sol resplandecía y me acariciaba con su luz. Todo formaba parte de mi ser. El cielo parecía más claro. El aroma me era familiar. Los colores me producían una inmensa felicidad. Supe entonces, al atravesar aquella puerta, que había recuperado mi identidad.

QUIERO DECIRTE

Habrá un día, en que mis días ya no serán y mi melodía ya no endulzara tus oídos, entonces, yo quiero preguntarte porque eres cruel conmigo ¡¡porque disfrutas!! viéndome dar volteretas en esta celda en la que me tienes encerrado , acaso? no te has dado cuenta que estoy buscando desesperamente la salida.

Si Dios me dio alas para volar y a ti te dio la razón para discernir entre el bien y el mal, entonces, déjame partir, abre las puertas y deja que mi canto sea, finalmente, la de un ave en libertad, dejando huellas en el cielo que te cobija.

ES DE NOCHE EN LA CIUDAD

ES DE NOCHE EN LA CIUDAD

En la noche una madre piensa en su hijo, otra plancha los guardapolvos para el día siguiente, la ciudad comienza a dormirse, mientras, el camión recoge la basura en la fría noche de julio,

Camina sin rumbo, siente frio en el alma, su cuerpo adormecido por la incertidumbre ya no tiene sensasiones, algunos borrachos en las calles y bares que cierran a su paso.

 Las prostitutas, rojo carmín en la boca, celeste furioso en sus parpados, organizadas en una esquina, alegres, provocadoras, dueñas de su existencia.

 Es noche de invierno, y la gente descansa, ella, ya no piensa, ya no siente, se va,¿ adónde? no sabe, a cualquier lugar.

 Todavía queda, una luz encendida en algún ventanal, sus pasos siguen, sus ojos cansados de llorar, un hospital iluminado, allí la muerte esta latente, entonces se da cuenta que ella también algún día morirá, y los demás seguirán sus vidas, como esta noche dormida que mañana despertara.

 Se pregunta de que sirve huir, no deja de caminar, a lo lejos ,se ven   los indigentes abrigarse del frio alrededor de una fogata, entonces entiende que deberá enfrentarse y darse cuenta,

 Sigue su camino incierto, un mendigo busca en la basura, un hombre en bicicleta, un viejo sinvergüenza quiere levantarse una pendeja y a ella se la ve canchera en su oficio.

En la noche, un portazo, un grito, un insulto, como un niño asustado huyo.

Es de noche en la ciudad, en un paisaje desolado sus habitantes atormentados derraman sus miserias.

 Es muy tarde y ya  no tiene miedo, esa sensación  quedó  en otra parte porque el odio tiene mirada de hombre, vos que se clava como un puñal en su corazón y no hace falta más para lastimar.

  Ya no hay nadie en las calles, solo sus pasos, solo ella, es tiempo de vivir, quererse y cuidarse porque nadie lo hará.

.Entonces, ya no regresara.

Ahora, la vida tiene otro color, le pertenece.

Ahora, amanece en la ciudad.

 

TODOS TENEMOS HISTORIAS QUE CONTAR,EL SECRETO ESTA EN EL DECIR.

EL AMOR NO ES
SACRIFICIO
LO ES
CUANDO NO HAY AMOR.